Concurso de vinos en cata ciega casera con amigos
Esta es una actividad muy divertida para hacer en una reunión de amigos.
Consiste en una reunión en una casa en la que cada participante o cada pareja aporta una botella de vino para el concurso. La botella debe llevarse envuelta en papel de plata para que no se pueda ver que vino es y nadie sepa que botella ha llevado cada participante. El anfitrión de la casa escribirá un número en cada botella.
Este concurso suele ser más divertido si la mayoría de los participante no entiende de vinos y se deja llevar unicamente por su gusto y paladar. Deben establecerse una normas para que todos los vinos sean homogéneos como por ejemplo:
- la botella debe tener un valor de compra de entre 10 y 15 euros.
- un tipo de vino (blanco, tinto, rosado, dulce, espumoso) ya que si no se dice nada y concursa uno dulce contra tintos por ejemplo, seguro que gana el dulce porque gusta a todo aquel/aquella que no entiende de vinos.
A cada participante se le da un papel para puntuar cada botella de vino. Las puntuaciones se harán sobre sabor, olor, color y todo aquello que se os ocurra y con una nota del 1 al 10 por ejemplo. Se empieza por la botella número 1 (por eso las ha numerado el anfitrión). Después de probar cada vino conviene beber agua para que al degustar el siguiente vino no tengamos en la boca el sabor del anterior. También se puede picar algo de comer entre vino y vino.
Tras probar todos los vinos se suman las puntuaciones y el que haya sumado más puntos gana y la persona que haya llevado esa botella es el ganador del juego por haberla elegido.
La cantidad servida de vino para la cata puede ser pequeña (lo justo para probarlo) o más generosa, pero hay que tenerlo en cuenta porque tras una degustación de 8 ó 10 botellas el alcohol ingerido puede empezar a manifestarse por lo que recomiendo ser cuidadoso.
En este tipo de cata entre aficionados poco entendidos generalmente no gana el mejor vino según rankings oficiales, pero para eso están los gustos.
Lo que os puedo garantiza es que las risas y la diversión está servida entre todos los participantes y seguro que querréis repetir la velada.
Aún tengo el recuerdo del ganador en la primera cata a ciegas en la que participé: El vino tinto Milflores.
Fuente de la foto: Web bodegadirecta.es
¿Te animas a hacerla en tu casa con amigos? Cuéntame en los comentarios si ya la has hecho y que te ha parecido compartir ese rato con tus amigos.
Raúl
Que bien lo pasábamos con esas catas a ciegas, en las que por más que nos esforzáramos, siempre ganaba el Mil Flores. Gracias por tu entrada.
ResponderEliminarGracias a ti Jorge. Momentos inolvidables. Me encantan las tortillas de patata y de lo que sean
EliminarYo personalmente he participado en ese tipo de catas con amigos de hace muchos años y no especialmente enólogos y puedo decir que es un tipo de reuniones en las que disfrutas no tanto de los vinos cómo de las risas y de las ocurrencias y comentarios al hilo, por aparentar que se conoce el tema ..mi amiga Elena calificó de "aguachirri" a un vino al que calificó con un 9..!!!...risas garantizadas.
ResponderEliminarCompletamente recomendable este tipo de reuniones en épocas como la que estamos viviendo en general, en las que todos necesitamos un momento de esparcimiento y relax.
Que no os la den con QUESO!
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